En mis 41 años de vida, no sé si son pocos o muchos, viví dos ocasiones una misma situación con restaurantes chinos. Denuncian que encontraron en el interior de estos carne de animales de dudosa procedencia o especies no aptas para el consumo humano.
Las dos veces mi respuesta ante esta situación ha sido la misma: Seguir disfrutando con normalidad y entusiasmo de la gastronomía de China, que por cierto es deliciosa y fue de mis primeros amores gastronómicos allá por 1995 en Cartago.
Sé que los ticos somos brillantes a la hora de hacer chota, por eso cuando en mayo se encontró una bodega donde aparecieron congelados restos de animales aparentemente inusuales para el consumo humano, las bromas, memes y stickers aparecieron cual políticos en la semana previa a elecciones.
Lo malo de esto es que los empresarios, cocineros, restauranteros de comida china de inmediato vieron sus ventas bajar. Y en buena parte se debe a nuestra costumbre de generalizar.
A qué me refiero; que asumimos que sí apareció una especie animal extraña congelada en una bodega, entonces eso significa que en todos los restaurantes de comida china nos dan carne de gato, perro o quién sabe qué otro animal en lugar de cerdo, res, camarones, etc.
Generalizamos y eso no está bien. Entonces si esa es la norma, no hay taxista bueno, chofer de bus decente o albañil respetuoso de las mujeres. Y lo cierto es que hay taxistas no solo buenos, sino excepcionales; choferes de bus admirables en su trato al pasajero, incluso algunos que arriesgaron sus vidas por defenderlos de un asaltante, etc.
Hagamos otro ejercicio acerca de generalizar para mostrar el punto. Imaginemos que yo a los 21 años me enamoré perdidamente de una compañera de universidad y nos hicimos novios, pero ella traicionó nuestro amor al serme infiel; en ese momento yo asumo que todas las mujeres son infieles y por eso no se puede confiar en ninguna.
Si actuara como en el ejemplo anterior, estaría destinado a estar soltero de por vida y no me habría dado la oportunidad de conocer a una mujer maravillosa con la que me casé.
Lo cierto es que esas generalizaciones que creemos que es como funciona el mundo o es la realidad son solamente nuestras creencias o convicciones, las que te hacen concluir que si así de determinada manera es como lo pensás es porque esa debe ser la realidad.
Entonces asumís que sí, todos los chinos te dan carne de perro y gato en tus pedidos y por eso no vas a comer comida china.
Aunque este blog no es de pensamiento humano, me parece una reflexión importante para darnos cuenta que podemos estar cometiendo un error que afecte seriamente a los restaurantes chinos.
Desde luego que podemos tener algunos parámetros a la hora de elegir dónde ir. Cómo se ve el lugar, como es el aseo, quien cocina es quien cobra, se ve la cocina y se nota que los ingredientes están almacenados correctamente (muchos restaurantes chinos tienen la cocina abierta).
Al igual que usted no comería en un restaurante de cualquier otro tipo que se vea desaseado, sucio o de dudoso cuidado, pues no haga lo mismo al elegir dónde comer comida china.
Dicho lo anterior
Llegado a este punto quiero recomendarles tres comidas, platillos u opciones de la comida china que según yo deberían probar. Escoger tres es una injusticia, porque son muchas las opciones ricas.
1-Costillas de cerdo en miel y ajo
Por alguna razón que probablemente la química podría explicar, la carne de cerdo va de maravilla con salsas o acompañamientos dulces.
Por eso quedé enganchado de este plato cuando probé por primera vez las costillas de cerdo, cortadas en trozos pequeños que se fríen a una temperatura muy alta y luego se logra una cobertura de miel con ajo que le da un sabor que combina de maravilla lo dulce con lo salado, lo jugoso de la carne y ese sabor que siempre aporta la grasa.
Un gran acompañamiento para este plato suele ser el arroz blanco cocinado al vapor, porque nos permite bajar un poco la intensidad de notas dulces de la preparación.
2-Camarones con cáscara y sal
Tan sencillo como suena. camarones fritos con todo y su cáscara, son sazonados con sal. Estoy seguro que deben tener algún otro condimento o ingrediente, porque saben mortalmente ricos. Yo llegué a pedir en una ocasión dos órdenes y me las comí solo, sin compartir. Una vez más el arroz blanco al vapor es un buen acompañamiento o bien unas occidentales papas fritas.
3-Dim Sum
No es propiamente un platillo, más bien es un tipo de bocadillos que se preparan al vapor. Hay cientos de variedades, rollos, albóndigas, panes, empanaditas y un larguísimo etcétera.
El concepto es una comida que primero que nada suele compartirse, por consiguiente se ordenan dos o más estilos en la mesa y se van comiendo según el gusto de cada comensal.
A mi me encantan los rellenos de camarones y cerdo, sin duda mis favoritos. Pero he probado al menos unos 15 distintos, incluyendo opciones con mondongo estilo chino y patas de pollo.
Y uno extra de cortesía de este que escribe: Camarones con semillas de marañón en salsa y desde luego, acompañado de arroz al vapor.
Los primeros tres platillos son usuales en restaurantes como Wongs (El Chino Satánico), Casa China, Don Wang y muchos otros.