Yo no soy de hornear queques navideños y por eso creo que muchas otras personas al igual que este que escribe pueden valorar una guía corta de queques navideños para comprar.
Fui a cuatro lugares. Dos de lo que podríamos decir son cafeterías o negocios de cadena y otros dos más artesanales.
Spoon y Auto Mercado
Son lugares donde muchos podemos ir a comprar, por eso los elegí.
En cuanto al queque de Spon contarles que es una porción pequeña con un valor de ¢870. Tiene un decorado con colores muy navideños, que a mi juicio no le aporta nada en el sabor.
En cuanto al queque tengo que decir que me gustó su perfume a licor, sin que esto signifique que al probarlo sepa a destilado. Se nota que está hecho con una cantidad importante de nueces y frutos secos.
El bizcocho o masa tiene un buen sabor y es ligeramente seco. Una porción es ideal para una tarde de café o rompope en el que esté presente la moderación. Si se es muy comelón posiblemente lo mejor sea dos porciones y que en enero le pongamos bonito al ejercicio.
Acerca del ejemplar del Auto Mercado. Su valor es de ¢1.200 la porción. Esta es mucho más grande que la anterior mencionada. Viene oportunamente envuelta en porciones individuales y es un poquito más húmeda.
Contrario a la anterior, a esta le faltó ese perfume a licor tan característico en este postre navideño. Su cantidad de nueces está más austera y es notorio que busca ser más un producto comercial donde los costos están bien cuidados y por eso puede que sea más grande (y caro) pero es más queque y menos de todas las cositas ricas que lleva en su interior.
Sabe bien desde luego, no podría esperar que del Auto Mercado algo se elabore mal, y con un poco de rompope va bien.
Mi favorito en esta categoría es el de Spoon, así que si quiero más valdrá la pena hacer la inversión.
Kawah Café y Sweet Café (Heredia)
Como ciudadano empadronado en Heredia, decidí apoyar a mi manera el comercio local. Por eso fui a una cafetería de la cabecera de provincia y a otra del cantón de San Rafael, donde vivo desde el 2013.
Kawah Café es un lugar al que visité con muy buenos resultados en el pasado, también escribí reseñas para otros medios. Es una cafetería con una terraza muy linda y dónde se preocupan mucho por sus productos.
Aunque en esta ocasión solo fui a comprar para llevar, no dudo de la calidad del producto.
Lo primero que uno nota es que tiene un decorado con almendras fileteadas, un toque original. Por dentro era del tipo esponjoso, similar a los queques de zanahoria. Sabe bien, tiene una proporción balanceada entre la masa del queque y los frutos secos.
De los dos locales heredianos este es el que tiene el queque menos dulce, un sabor menos intenso. Eso no es ni bueno ni malo, solo es lo que se nota al probar ambos.
100 sur y 300 oeste de la iglesia católica de San Francisco de Heredia, teléfono 2263-3737 y en Facebook e Instagram aparecen como @kawahcafe
En cuanto a Sweet Café, un nuevo comercio del barrio, fue un bonito detalle que aunque no tenían queque navideño a la venta en porciones, al momento de preguntarles decidieron partir uno de sus productos.
La porción nos costó ¢1.500, es de los que son más húmedos y el perfume a queque navideño se notaba al abrir la caja en el que venía. La cantidad de nueces se siente agradable, le da ese crocante que se disfruta y al tener una taza de café negro de grano recién molido con el aroma del queque se genera una experiencia muy agradable.
Sweet Café se encuentra al lado del Banco de Costa Rica, abren todos los días y aparecen en Facebook como Sweet Café Costa Rica. Teléfono 8808-1443.
De los dos mi predilecto resultó el de Sweet Café, lo volvería a probar feliz de la vida.
Un toque de historia.
Revisando una nota que publicó mi colega y excompañero de La Nación don Randall Corella, el origen del queque navideño se remonta a tiempos de Roma antigua.
En la nota del 2012 Corella explicaba, basado en una entrevista con la experta Marjorie Ross, que el queque navideño tiene un posible origen en un pan dulce que se le daba al pueblo y en el interior se “escondían” habas y a la persona que le correspondía era una señal de prosperidad.
“Entonces se preparaba en diciembre un pan dulce especial, escudo contra los males y anzuelo para la buena suerte. La costumbre estaba tan arraigada, que la Iglesia Católica no la prohibió, sino que la reguló y exigió que los panes fueran al templo para ser bendecidos”, afirma Ross en esa nota de La Nación.
De ahí tenemos evolución del pan hasta lo que se conoce como la rosca de reyes en España. Donde en su interior se escondía un hada como señal de protección y riqueza.
La llegada de lo que hoy conocemos como queque navideño se puede rastrear hasta antepasados provenientes de Inglaterra, Italia, Jamaica, Francia o España y su influencia en la provincia de Limón.
“Se dice que la proveniencia y variedad de las especias que aún se les ponen, simbolizan los regalos que los Reyes Magos llevaron a Jesús recién nacido; y las frutas secas, los frutos de las buenas obras, que serían recompensadas en el año siguiente desde el Cielo. Una lección de historia, geopolítica y religión, contenida en una tajada de queque”, concluyó Ross en aquella nota del diario de Tibás publicada en el 2012.
Yo me sigo haciendo una pregunta ¿De quién fue la genial idea de ponerles licor?