Hay lugares por los que uno ha pasado mil veces y nunca los notó. Hasta que un día los descubrís y te decís: ¿Cómo pude pasar por aquí tantas veces sin verlo?
Eso me pasó con Charles BBQ, ubicado sobre la radial a Lindora. Según el local, abrieron en 2020, y como su nombre lo sugiere, ofrecen dos de los productos esenciales de un auténtico restaurante de este estilo: brisket y costillas de cerdo ahumados durante horas, logrando una carne suave y llena de sabor.
Como siempre les cuento, esta no era una visita pagada ni en colaboración. Fui con dos amigos que no veía hace tiempo, y uno de ellos lo recomendó.
El lugar es más grande de lo que parece desde afuera. Aunque todavía tienen un foodtruck en el interior, ahora es solo parte de una cocina mucho más amplia debido a su crecimiento.
El servicio fue otro detalle que me llamó la atención. Nos atendió Tomás, quien en todo momento explicó lo que caracteriza la comida del lugar.
Entrada
Soy fan del brisket, lo confieso. De hecho, tengo la promesa de cocinar mi primer brisket este mes, pero todavía no lo hago. Es una carne singular: dura y grasosa, pero que con paciencia, ahumado a baja temperatura y muchas horas, se transforma en un manjar.
En Charles BBQ podés pedir el brisket en porciones de 100 gramos por ¢3.900 (impuestos incluidos) o hasta en un kilo. Es una excelente opción si nunca lo probaste y no sabés si te va a gustar.
La carne mostraba el característico anillo de ahumado de una buena cocción. Estaba suave pero firme, permitiendo disfrutar cada bocado con una mordida satisfactoria.
Tenía una buena cantidad de grasa, lo que evitaba que estuviera seco, uno de los peores errores en un brisket. Cada bocado era una mezcla deliciosa de carne jugosa y grasa inolvidable.
El brisket viene acompañado de una porción de ensalada coleslaw. Me pareció promedio y no estaba a la altura de la calidad de la carne.
Hamburguesa
Si te gustan las hamburguesas, aquí tenés 12 opciones, todas acompañadas de papas fritas. Los precios van desde ¢5.950 hasta ¢9.950 más impuestos.
Soy un romántico de las hamburguesas, y las amo. Como era mi primera vez en Charles BBQ, pedí la combinación más clásica: doble torta, doble queso, pan, queso cheddar y salsa de la casa por ¢6.950 más impuestos.
El pan, una mezcla de papa con masa madre, estaba bastante bien, aunque se ablandaba por la jugosidad de la carne y la salsa. Las tortas, de unos 125 gramos según el menú, se cocinan al estilo “smash”.
La hamburguesa cumplió con las expectativas, aunque a mi gusto estaba algo salada. Claro, esto es subjetivo, porque todos tenemos distintos niveles de tolerancia a la sal.
Postre
Tienen postres, y según me aseguraron, son hechos por ellos mismos. Pedí el tres leches, servido en una jarra. Su sabor estaba bien, con un toque de canela agradable, pero me habría gustado que fuera un poco más grande o más barato.
Sin embargo, recordé que estaba comiendo en Lindora, y lo entendí.
Ellos están en un pequeño centro comercial junto al banco Davivienda, y los podés ubicar fácilmente en Waze. Abren toda la semana desde las 11:30 a. m. y cierran a las 11 p. m. los viernes y sábados, mientras que el resto de los días cierran a las 10 p. m.
El teléfono es 6119-2008 y están en Instagram, Facebook y TikTok como @charlesbbqcr o simplemente @charlesbbq.