Han tenido ocasión de estar en un restaurante al que no le tienen mucha fe, pero después salen contentos. Esto es lo que me pasó cuando visité el restaurante Gracia en Escazú.
No tengo idea de cuándo lo abrieron, desconozco si tiene alguna gastronomía en la que sean especialistas. Sólo sé que hace algún tiempo allí había una pizzería y que ahora hay un restaurante con una terraza en un segundo piso muy bonita. Pero lo más interesante es que la comida tenía buen sabor e invita a regresar.
Los precios de los productos rondan entre los 4900 colones, por ejemplo, una sopa de tomate rostizado o una crema de lentejas. Hay otras entradas como el mezze o la burratina, con precios entre los 9000 y los 11,000 colones, los precios ya incluyen todos los impuestos (ven que no es tan difícil).
Algunos platos fuertes tienen precios entre los 8000 y 13,000 colones. En el menú se puede elegir entre platillos como camarones al ajillo, mejillones al vino, kebab de cordero, ensaladas, entraña, corvina, y algunas pastas.
La entrada
La elección fue sencilla: un humus israelí acompañado de pampita tiene un valor de 5900 colones. La presentación de este platillo de verdad que invita a comerlo, se ve que tiene color y unos tomates cherry que combinan muy bien.
Y aunque no me encanta que le hayan puesto cebolla, sinceramente es una entrada que volvería a pedir, porque la combinación entre aceite de oliva, limón y otros ingredientes propios de este platillo me pareció que tenía un buen balance.
Los platos fuertes
Como plato fuerte decidí probar la entraña importada de Estados Unidos, es un corte Angus que se acompaña con papas fritas, vegetales y una mantequilla comestible. El precio es de 15,550 colones con los impuestos incluidos.
Me parece que la guarnición va muy bien, tienes las papas que te generan ese acompañamiento de un carbohidrato, tienes unos vegetales que están todavía crujientes, pero desde luego lo más interesante e importante es el corte de carne.
En término medio se disfruta el sabor propio de la carne de tipo Angus, además la mantequilla que lo acompaña le agrega un sabor muy agradable y la combinación hace que en el paladar se disfrute su jugosidad y suavidad.
El otro plato fuerte que pedimos durante la visita fue la corvina al vino con alcaparras, servida sobre una pasta. El pescado tenía un buen sazón, la combinación con alcaparras y vino es sencillamente ganadora.
La carne se sentía aún jugosa pero bien cocida. Para mi gusto, algo muy personal, esto es muy importante y se logró muy bien.
Tengo que decir con honestidad que la pasta como tal sentí que estaba demasiado al dente, tal vez un detalle menor, pero cuando vas a un restaurante donde además esperas cierta calidad acorde a su precio, es algo que tal vez no debería pasar.
Sin embargo, insisto, es un detalle menor que no termina interfiriendo con el resultado final que es una buena experiencia en el lugar.
El postre
Un postre nunca está de más. Decidimos preguntar en el lugar cuál nos recomendarían, y muy amablemente nos sugirieron uno. En este caso, el budín elaborado con pasta de croissant: imaginen la pasta de un croissant acompañada con dulce de leche, servido sobre una hermosa base.
A mí me gustó mucho, sin embargo, a mi esposa (que disfruta mucho de los postres) le pareció que este era más apropiado para una tarde de café que como postre al final de la comida. Es lo que les digo, todo es cuestión de gustos y puntos de vista. El precio es de ¢4500.
Según sus redes sociales, el restaurante Gracia está abierto todo el año, 365 días a partir del mediodía para almuerzo, café, unas copas por la tarde o cena. Algo que me gusta es que en sus redes sociales puedes encontrar el menú completo y de esa forma ustedes mismos pueden juzgar el precio de los platillos y así no llevarse ninguna sorpresa y de paso ver fotos de los platillos que de verdad atraen.
En instagram @gracia_escazu y en Facebook como @graciaescazu teléfono 7003-3901, Escazú Plaza Natura.